jueves, 3 de noviembre de 2011

Palabras de la Presidenta Cristina F. de Kirchner en el Panel de "Seguridad Alimentaria", en la Cumbre G20

Un discurso memorable para compartir con propios y extraños.
PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, DURANTE SU PARTICIPACIÓN EN EL PANEL "SEGURIDAD ALIMENTARIA" DEL FORO DEL EMPRESARIO, EN LA CUMBRE DEL G-20, EN CANNES, REPÚBLICA DE FRANCIA.

He escuchado hablar de desarrollo, crecimiento, pero no puedo antes no reivindicar un poquito el género, frente a la expresión del señor Polman que nos quiere llevar a trabajar al campo, estamos dispuestas a colaborar las mujeres con el trabajo en el campo. Me hace acordar un poco cuando querían llevarnos únicamente a la cocina o de la cocina al campo ahora.
Pero creo que él toca un tema central, que está también vinculado con otro tema que se abordó y que es la creciente urbanización y despoblamiento del campo, que también está vinculado por lo menos, en la experiencia de la Argentina. Nosotros tenemos hoy entre el 90 y el 92 por ciento de población urbana, siendo por ejemplo el octavo país en extensión y siendo además, uno de los países líderes en producción agroalimentaria y esencialmente también líderes en materia de innovación tecnológica y productividad.
Hoy la Argentina tiene en el mundo -me atrevo a decir- el mejor grado de productividad por hectárea sembrada, a partir precisamente de la introducción, la innovación, la tecnología y la biotecnología que han sido imprescindibles y que van a continuar siendo imprescindibles para producir cada vez más y mejor.
Pero esto al mismo tiempo crea una contradicción, como sucede con todas las innovaciones tecnológicas y que es, a mayor grado de innovación tecnológica, a mayor grado de eficiencia productiva, menos número de empleo por hectárea, con lo cual estamos ante la contradicción que cada vez que avanzamos en productividad y que avanzamos en tecnología, se hace una reducción de la mano de obra y por lo tanto la gente a las grandes ciudades, porque carece de oportunidades.
Qué hemos formulado nosotros como una respuesta a este problema creciente que además despoblar el campo y urbanizar excesivamente las ciudades, trae problemas de inseguridad, trae problemas en infraestructura urbana, trae problemas de miseria, en definitiva una contradicción de lo que puede ser una gran producción agrícola.
Nosotros hemos presentado en el Plan de Agricultura Nacional, en el Plan Agroalimentario Nacional 20-20 como lema: la industrialización de la ruralidad. Por eso, en esta mesa me acompañan no solamente el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, sino también la ministra de Industria, Débora Giorgi.
Nosotros creemos que una de las claves unida a la tecnología, a la mayor productividad, es lograr el agregado de valor a cada uno de esos productos, a los distintos eslabones de la cadena productiva, en el lugar de producción. Esto tiene que ver no solamente con una cuestión de tener nuestras familias situadas en sus lugares de origen, sino que también va a ser un problema de competitividad, porque una de las cuestiones de la competitividad va a estar dada por la logística también.
Si yo evidentemente tengo también que trasladar mis materias primas a determinados kilómetros para poder industrializarlas, esto evidentemente me va a restar competitividad en lo que hace a la industrialización y al valor agregado, con lo cual el tema de industrializar la ruralidad que quiere decir agregar valor en el lugar de origen donde se produce la materia prima con alto grado de productividad y eficiencia, es uno de los objetivos, no solamente sociales sino también además económicos. Lo hemos definido como algo central, este es un tema que no se trata entonces de la mujer, sino también por ejemplo de nuestros jóvenes que por allí se capacitan en los centros universitarios, se capaciten también en aquellos sectores para volver a sus lugares de orígenes y agregar cada vez mayor valor, innovación y tecnología.
Ustedes saben que Argentina también en materia de biotecnología, es uno de los países líderes del mundo. Tenemos en Latinoamérica la mayor proporción de empresas de biotecnología por habitante. Hemos desarrollado esto que tiene que ver con la productividad que hemos alcanzado, con la siembra directa y con cosas que no voy a explicar porque todos ustedes saben perfectamente.
Pero quiero abordar los que son los puntos de la Seguridad Alimentaria. Esta Presidenta le ha tocado ser defensora de la Seguridad Alimentaria de la República Argentina, muchas veces con algunas críticas por parte del sector privado, porque hay un refrán en mi país que dice: "la calidad bien entendida empieza por casa", y si no puedo asegurar la seguridad alimentaria de mi pueblo, mucho menos voy a poder contribuir a la seguridad alimentaria global.
Pero de hecho la Argentina, en esta seguridad alimentaria, que es una gran productora de alimentos con apenas 40 millones de habitantes y con posibilidades de producir alimentos para 400 ó 500 millones manteniendo esta seguridad alimentaria, porque tenemos excedentes suficientes, cosa que no les sucede a otros países que tienen productividad, que alimentan pero por su gran número de población no alcanzan a tener grandes excedentes, coloca a la Argentina en un lugar privilegiado como productora agroalimentario y como contribuir a la seguridad alimentaria. De hecho hemos pasado de 67 millones de toneladas de granos a 102 millones de toneladas de granos en esta última cosecha. Y la brecha creo que conservadora del señor ministro de Agricultura, yo creo que vamos a ser más, es para el 20-20 año 2020 producir 160 millones de granos.
Creo personalmente que con el desarrollo actual de la Argentina, con el nivel de inversión que tiene también el productor en la República Argentina, el sector privado, más el nivel -que aquí quiero también tocarlo- de infraestructura que ha construido el Estado, quiero decirles que del año 2003 a la fecha los planes de infraestructura han crecido exponencialmente, a punto tal que han llegado a constituir entre 4 y 5 puntos del PBI en el último ejercicio, por ejemplo, a través de programas como el PROSAC financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo del cual también se habló aquí de cómo financian los organismos multilaterales, hemos logrado la irrigación de más de 2 millones de hectáreas.
¿Cuál es el problema que yo veo en lo futuro? Puede ser el climático, evidentemente inmanejable para nadie. De hecho Argentina tuvo un importante período de sequía durante el año 2008 y 2009, con lo cual he encomendado al señor ministro de Agricultura y a todo el sector de Infraestructura y lo he charlado también con los productores y el sector empresario, que la tarea de irrigación es fundamental para prevenir la sequía, en un país donde además tenemos un acuífero muy importante.
Ustedes saben que América del Sur tiene algo así como el 25 ó 30 por ciento de reserva del agua potable del mundo, con lo cual nosotros podemos con un fuerte Plan de inversiones, garantizar por lo menos de no tener que mirar el cielo, a ver si cae agua. Esta es una de las claves también en infraestructura de puertos. Tenemos un complejo, el complejo oleaginoso, o sea el granero más importante está en el puerto de Rosario y hemos desarrollado una infraestructura que es la Hidrovía, que nos permite -ustedes saben- el transporte marítimo. Es, en el término de costos una ecuación importante y estamos también volviendo a desarrollar luego de muchas décadas, el transporte ferroviario.
Todos sabemos que el transporte en camiones, más allá de los 100, 150 kilómetros, torna no competitiva a la producción, con lo cual es necesario contar con transporte a través de ferrocarriles y fundamentalmente marítimos, para poder por ejemplo en el caso nuestro, llegar en el año 2014-2015 directamente con barcos de muy alto calado hasta Asunción, lo que significaría poder sacar la producción vía marítima de todo lo que es el sur de Brasil, de todo lo que es Paraguay, de parte de Bolivia, de toda Argentina y obviamente de Uruguay que allí está. Con lo cual también concebimos a la infraestructura tal cual se ha explicitado aquí, como algo fundamental en esta cuestión.
Otra de las cosas que ha abordado el señor Polman, es también el término de la inversión; la inversión también ha crecido exponencialmente en la República Argentina en materia de producción agroalimentaria, y ahora también se ha incorporado a través de leyes promocionales del Estado, el tema de la inversión. Yo sé que en materia de seguridad alimentaria es un tema muy discutible que es el tema del bioetanol y el biodiesel, pero el tema de los combustibles y la competitividad de la utilización de los combustibles en el sector agrícola también tiene que ver. Nosotros estamos apuntando objetivamente a que el propio productor negocie, obtenga su propio combustible, de manera tal de poder quedar no sujeto a la variable de un commodity internacional, como es el petróleo que puede impactar negativamente en la producción.
Si el productor argentino pudiera independizarse definitivamente y la variable energética para la producción, estaríamos logrando aún mayor competitividad porque estaríamos eliminando una variable de carácter internacional.
El tema de transparencia, creo que también se habló de investigación y tecnología, quiero adelantarles que nosotros estamos analizando en estos momentos más de 200 eventos tecnológicos. Hace muy pocos días, más de un mes entre el INTA que es un organismo estatal en la cual está integrada también la parte privada, hemos logrado la primera vaca transgénica productora clonada, vaca clonada productora de leche materna. Estamos realmente con investigaciones muy importantes en este sector, estamos trabajando también con semillas, como ya se indicó, de mayor profundidad en su raíz, para que ante una eventual sequía, puedan obtener agua, y también hacerlo sustentable de manera tal que esto no signifique afectar y tocar el medio ambiente, con lo cual los temas que se han abordado aquí, son realmente motivo de este Plan 20-20, son además una realidad en la República Argentina.
Hablábamos también de producir mejor y quería tocar el tema de la agricultura familiar, que fue un tema que también se abordó aquí y quiero decirles que prácticamente el 70 por ciento de lo alimentario en la República Argentina está sostenida por la agricultura familiar. Tenemos un gran desarrollo de agricultura familiar, en horticultura, en fin en todo lo que constituye la mesa de la familia.
Se habló también de la responsabilidad del empresariado y de empresa social, creo que alguien habló de empresa social aquí. En Argentina hay un gran desarrollo en materia de cooperativas, que es la forma más social que podemos abordar nosotros en una economía capitalista -de eso estamos hablando- y que la Argentina ha tenido un gran desarrollo. De hecho un 20 por ciento de la producción granaria se comercializa a través de cooperativas y algunas se están disputando a las grandes cerealeras, a las grandes exportadoras poder participar aún en mayor grado también de esa comercialización. Una de nuestras empresas líderes lácteas, SANCOR, está conformada precisamente en la Cuenca lechera de la República Argentina, bajo la forma de cooperativa. La cooperativa es una experiencia exitosa en la Argentina en materia de producción, de inversión tecnológica y de inversión productiva.
Quería hablar especialmente de la transparencia de los mercados que en definitiva, es el tema que abordaron los tres que me precedieron en el uso de la palabra, el señor Polman entre otros, pero fundamentalmente el señor ministro de Agricultura de la República de Francia en cuanto a la regulación de los mercados.
Yo creo que el problema no reside en el problema de los granos, creo que el problema reside en el sistema financiero. Creo que enfocar únicamente el problema de regulación de los mercados como una cuestión de seguridad alimentaria únicamente sobre los commodities, me parece una visión absolutamente parcializada, lo digo con honestidad. Porque de manera tal también podríamos decir entonces que deberíamos regular el mercado de las patentes medicinales. Por ejemplo, es muy importante comer porque si no uno se muere. Ahora también, si uno no cuenta con tecnología y con remedios, también se muere. O sea que si hablamos de seguridad alimentaria, si hablamos de seguridad de vida porque en definitiva estamos hablando de seguridad de vida, deberíamos también por ejemplo, hablar de regular el mercado de royalties y patentes medicinales, porque creo que en África no solamente se mueren de hambre sino que también se mueren por no contar con medicamentos, con atención sanitaria, sin embargo, hasta ahora no he escuchado ninguna palabra acerca de regulación de los mercados, por ejemplo, de tecnología sanitaria que son claves, y además, es tan humillante morirse de hambre como morirse por no tener una aspirina o no tener una vacuna.
Me parece que entonces cuando hablemos de regulación para cuidar la vida, tenemos que hablar de todos los aspectos, pero fundamentalmente del empleo, de la posibilidad de un empleo digno que es necesario introducirlo también en esta cuestión. Nadie puede tener seguridad alimentaria, seguridad de vida si no cuenta con un trabajo que le proporcione los elementos, y por eso creo que el empleo va a ser un tema de este G20, que le proporcione las posibilidades; empleo que además, tiene que ver también con volver a un verdadero capitalismo. Porque yo creo que estamos hoy, -sinceramente lo voy a plantear más tarde con mis colegas- en una suerte de capitalismo anárquico o anarco capitalismo financiero, si se me permite. Los mercados financieros hoy están en los commodities y conviene en los commodities, mañana o pasado mañana están en el petróleo según como vaya el petróleo, y pueden mañana dedicarse a los mercados de caramelos si realmente tienen posibilidades de obtener un peso más sin trabajar, sin producir y sin invertir para perfectamente especular.
Por eso nosotros estamos sosteniendo que el verdadero problema es la falta de regulación de los mercados financieros en el mundo.
Señores: las grandes cerealeras, las grandes empresas por más grandes que sean, solamente pueden hacer movimientos especulativos evidentemente dentro de lo que constituye el sistema financiero. No hay posibilidades de especular, no hay posibilidades de obtener mayores o menores tasas de interés, si no está regulado también el mercado financiero en cuánto va a invertir, a quiénes va a financiar, cómo vamos a financiar, en qué condiciones. ¿A quiénes vamos a financiar? Vamos a seguir financiando a los brokers que solamente hacen derivados financieros o vamos a financiar a los que producen alimentos, bienes y servicios. Esta es la clave, creo que enfocar el tema en la regulación del mercado de commodities o de alimentos, es una visión absolutamente parcializada.
Yo soy fanática de la Realpolitik y sé dónde se deciden las cosas y dónde se adoptan las decisiones. Si quienes lideran el mundo, porque han querido liderarlo también además, no dan soluciones claras y concretas sobre el sistema de regulación financiera, si solamente siguen apuntando a controlar a ver en qué gasta cada país las cosas pero no controlan qué hace cada banco de inversión, en lo que hace cada calificadora, en lo que hace cada movimiento de Bolsa, díganme ustedes, son todos hombres de negocios o por lo menos vinculados a los negocios: ¿qué creen que pasa cuando un día la señora Merkel se levanta y dice algo que parece que cayó mal y las Bolsas se van a pique y pierden 4 ó 5 puntos? Al otro día se levanta el señor Sarkozy dice algo importante que parece que calma todo y vuelven a subir otros 10 puntos, al otro día el señor Papandreu decide una consulta popular y nos vamos todos para debajo de vuelta.
Ustedes creen que no hay gente que gana miles de fortunas con esos movimientos sin hacer absolutamente nada, solamente sentado en un escritorio y manejando una computadora. Eso, los líderes del mundo no han logrado solucionarlo y han pasado 3 años. Y por supuesto, cuando han pasado 3 años y no le dan la solución, cada vez se agrava más. Si lo tratan con aspirinas, si lo trata un médico, en este caso el Fondo Monetario Internacional, si lo trata además el G20, si le están dando medicinas, han inyectado miles de millones de dólares y de euros en el sistema financiero.
Yo sostuve en la reunión de Londres del día 2 de abril, que era necesario obligar a los sectores financieros a volcar a la economía real, esos recursos, porque si no hay consumos, señores, no hay capitalismo, no hay posibilidades de crecimiento de la economía.
Si nosotros hacemos planes de ajuste, si la gente no puede gastar plata, si la gente está endeudada en más del ciento por ciento de sus posibilidades, yo quiero que alguno me diga, desde Adam Smith, desde David Ricardo, desde Keynes, si no les gusta para algunos más de izquierda de Carlos Marx, cómo vamos a hacer para que vuelva a crecer la economía si no hay consumo, si el capitalismo hace eso, que la gente consuma y que ustedes, los empresarios produzcan y vendan cada vez más. Este es el tema, esto es lo que está fallando.
¡Quién me habría visto de mis épocas universitarias ahora! O sea lo que estoy proponiendo es volver al capitalismo en serio, porque esto que estamos viviendo, señores, no es capitalismo. Esto es un anarco-capitalismo financiero total, donde nadie controla a nadie. (APLAUSOS)
Entonces, la propuesta es que regulemos a los que realmente tenemos que regular. Resulta que vamos a regular a los países y ver cómo pueden ajustar. Además, van cayendo los liderazgos, y además, permítanme desde la política no ya desde la empresa, se van a comenzar a cuestionar los fundamentos de la democracia. Porque cuando la gente vea que la democracia no le da posibilidades de trabajo, de progreso, de tener casa, de salud, comienzan a cuestionarnos los funcionamientos del sistema político.
Ustedes piensen no en términos de 2 ó 3 años, piensen en términos de la evolución histórica de la humanidad, lo que ha pasado cada vez que el pueblo no ha podido comer. Y lo digo acá en Francia, cuna de la Revolución Francesa; cambian los sistemas. No estoy anunciando el fin de ningún sistema por favor. Simplemente estoy viendo mirar con perspectiva histórica y mirarlo con perspectiva de liderazgo histórico y ver que es necesario hacer un cambio en serio, porque también lo que algunos creen que está sucediendo en otros países, alguien habló recién de lo que pasa en África cuando la gente no puede comer o en Magreb cuando pasó lo que pasó, pero tampoco nos creamos el tema de la famosa revolución árabe que solamente tiene que ver con la comida. Tiene que ver también con gentes que tiene sistemas políticos diferentes a los nuestros y que no quiere vivir con las formas democráticas occidentales. No lo veamos solamente con un problema económico. El que crea que la primavera árabe es una cuestión de que quieren vivir como nosotros los occidentales, con división de poderes y demás, no me parece que se está leyendo correctamente. Y si no miren las fotos de la gente que festeja la caída de los gobiernos y vamos a ver gente vestida como musulmanes, islamistas absolutos y además, en la primera elección que se hizo en Túnez, la ha compartido islamista moderado pero islamista -y no tengo nada contra el Islam, en absoluto- simplemente les digo: tengamos una real comprensión del mundo en el que estamos. No nos equivoquemos y sepan que si esto se profundiza, van a empezar a cuestionarse las democracias y las formas políticas actuales.
Europa también tiene una historia en esto, de cómo surgen gobiernos totalitarios en medio de crisis económicas insolubles y que no pueden resolverse.
Yo creo que estamos a tiempo, no quiero ser dramática, ni tremendista, ni sembrar pánico porque no es mi misión como Presidenta de la República y tampoco porque lo creo. Creo que estamos en tiempo todavía y forma de poder establecer soluciones, pero soluciones que tengan que ver con la regulación de aquellos que han provocado el problema.
Pero además, y para finalizar, si uno ha probado ya durante 3 años determinadas medicinas y con determinados médicos y el enfermo se agrava cada vez más, ¿no será que habrá que cambiar de médico y de medicina e intentar otro tratamiento?
Esto es una cuestión de pura lógica, intentar resolver los problemas de la misma manera con la que fueron originados, decía Einstein que es de gente no demasiado cuerda.
Con esto quería finalizar, discúlpenme yo soy un poco....cuando hablo....están todos mirándome como si hubiera....pero es un poco los que me conocen.....me apasionan los temas, me interesan los temas, nada me es indiferente. Estoy absolutamente convencida de que tenemos que cambiar un montón de cosas y si me he propuesta de vuelta como Presidenta de la República Argentina, precisamente ha sido para colaborar con mi país, pero también saber que colaborar con mi país es colaborar con el resto del mundo para que las cosas se solucionen, porque la Argentina no es una isla, ni lo quiere ser tampoco. Al contrario, está absolutamente integrada al mundo tal vez como nunca.
Hemos crecido en nuestro comercio exterior de la década de los 90 en forma exponencial también, hemos duplicado nuestra integración al mundo en materia de comercio. Así que, déjenme que esta vehemencia es un poco la pasión y las ganas de solucionar los problemas. Muchas veces hay que afectar intereses, eso sí.
Esta es la otra gran definición y con esto quiero terminar: es cierto que muchas veces para solucionar determinados problemas, hay que afectar intereses e intereses que son muy poderosos. Pero yo me atrevo a decir que es mejor enfrentar esos intereses minoritarios pero poderosos, antes que más adelante enfrentar la furia de la sociedad. Se los digo con la experiencia de una Argentina que vivió un 2001 caótico que hizo colapsar prácticamente nuestro sistema institucional y dividió a la sociedad.
Muchas gracias. (APLAUSOS)

martes, 25 de octubre de 2011

CRISTINA KIRCHNER HA FIJADO LOS LINEAMIENTOS DE LA NUEVA GESTION Y LAS NECESIDADES DEL MOVIMIENTO POPULAR

La presidenta tuvo dos discursos contundentes pero a su vez distintos en sus líneas argumentativas. En el primero -ante funcionarios y delegaciones de la prensa internacional- se hizo hincapié en la necesidad de la unidad nacional. Sin embargo, la unidad nacional no apareció en ningún momento formulada como una simple intencionalidad emocional. Por el contrario, se la pensó como articuladora de la defensa de los intereses nacionales y regionales ante una coyuntura internacional que se presenta complicada por los efectos de la crisis del capitalismo financiero globalizado -que nos guste o no- tendrá impactos sobre el país y la región.
Fue importante el señalamiento de entender su lucha no como la “viuda de…” sino como la militante de largos años de lucha, aún en condiciones de aislamiento parlamentario cuando eran muy escasas la voces que se levantaban contra lo peor del neoliberalismo. Ese neoliberalismo -hoy en crisis terminal en el mundo- que había invadido y consolidado la apropiación del Estado al mismo tiempo que había perforado nuestro propio movimiento peronista.
Vuelve a colocar en la agenda varios temas que nunca fueron abandonados como la necesidad de seguir desendeudándonos, la vigencia de los derechos humanos, la recuperación del trabajo, la reindustrialización, entre los más importantes.
Sin embargo, tal vez la parte más incisiva del discurso lo produjo en la Plaza de Mayo donde instó a los jóvenes a la recuperación de las ideas de la organización en los frentes de luchas sociales o estudiantiles. Quien llama a la organización con tanto énfasis prevé que las dificultades serán muchas y que el movimiento juvenil deberá tener la solidez necesaria para dar las batallas que las circunstancias van a exigir. Otro tanto prevé con un movimiento obrero que tenderá a su renovación. La presidenta se mostró consolidada, respaldada popularmente y en condiciones de liderar un movimiento institucionalizado, legitimado, movilizado que tendrá la responsabilidad de conducir el país.

Profesor Daniel Lenci
Universidad de Buenos Aires

viernes, 14 de octubre de 2011

ANALISIS DE LA HOMILIA DEL 4 DE JULIO DE 2006 HOMENAJE A LOS MARTIRES SACERDOTES PALOTINOS




Se trató de una Misa de Homenaje a los Mártires Palotinos donde el Padre Sebastián hizo una homilía que fue severamente criticada por muchos compañeros.
En este caso: Crítica del Profesor Daniel Lenci, CNBA, UBA.

Hacer un análisis de la homilía del Padre Sebastián del 4 de julio de 2006, nos lleva inexorablemente a comenzar por ubicar el marco político institucional en el cual se desarrolla.

La misa realizada no era una misa cualquiera, -aún presuponiendo justamente que cualquier misa tiene importancia en si misma-, puesto que en la misma se conmemoraban treinta años del brutal asesinato de los hermanos Palotinos y a su vez, se encontraba presente entre otros funcionarios, la Senadora Nacional Dra. Cristina Fernández de Kirchner, actual Presidenta de los argentinos.

Esto último es decisivo, no por reverencia hacia el poder, sino porque la misma asistía en carácter de tres condiciones básicas:
·       Ser la esposa del señor Presidente de la República Dr. Néstor Kirchner.
·       Ser una comprometida participante de todos los temas vinculados con los derechos humanos y activa propulsora de la derogación de las leyes de obediencia debida y punto final, elemento por el cual de recomponerse las pruebas podría abrirse nuevamente el tema de los asesinatos de los hermanos Palotinos.
·       La actitud de descortesía con respecto a la pareja presidencial después del gesto de estar en Roma en la Iglesia San Silvestro In Capite, sede donde reside una Congregación Palotina. No olvidemos que la pareja presidencial fue recibida por Denise O’Brien que ejercía las funciones de dirección y por el Padre Horacio Pinasco que recibió al Presidente argentino con las siguientes palabras: “…Estamos orgullosos de usted y de su presencia. Gracias por no dejarnos solos porque durante muchos años nos sentimos abandonados…”


El padre Sebastián comienza su homilía con un marco explicativo claramente justificatorio de “…su aparente ceguera…” por la condición generacional de ser chico y no comprender lo que estaba pasando, pero luego afirma que …se debe ver al otro desde los ojos del alma porque de esa manera se ve a Dios…”, pero reconoce que en realidad durante treinta años no pudieron rezar juntos ¿Con quien pretendía rezar juntos?
La dictadura militar nunca manifestó deseos profundos de arrepentimiento. Rechazan en general la autocrítica Balza, vociferan intentando reivindicar el golpe terrorista de Estado, y accionan en contra del Presidente y la vigencia de los derechos humanos en cada oportunidad que pueden.

Aclaremos para entender las ideas en discusión en que consiste el planteo de “borrar” treinta años y pretender “rezar juntos”. El padre Sebastián afirma haber crecido con la famosa frase “algo habrán hecho” y que ello era injurioso, pero que también escuchó “perdónalos porque no saben lo que hacen”.

Debemos refrescar la memoria “del supuesto joven” Sebastián. (Lo de supuesto joven no lo decimos en términos de descalificación sino en el sentido de que si un ciudadano no es joven para dar su vida por la Patria como lo hicieron en Malvinas, o por su vocación como lo hicieron los jóvenes Palotinos seminaristas asesinados, menos lo es para intentar comprender la violencia del terrorismo de Estado). Le decimos al Padre Sebastián que su juventud no es excusa.

Recordemos lo básico: ¿Qué fue el proceso de reorganización nacional? Mediante ese nombre se denominó al momento donde se pretendió disciplinar a la sociedad argentina mediante dos tipos claros de violencia. La violencia del terrorismo de Estado y la violencia de mercado.
Se practica un terrorismo de Estado cuando éste utiliza las fuerzas armadas contra los ciudadanos y los despoja de sus derechos, especialmente del derecho a la vida. En el terrorismo de Estado se utiliza la tortura, la represión, la ocultación de información, se crea un miedo generalizado, se destroza la cultura crítica.

En este aspecto las palabras del Padre Sebastián son doblemente injuriosas, cuando sostiene que el creció escuchando que “…hubo una guerra sucia…”, que motivó desaparecidos y perseguidos, pero luego afirma que estaría compensado por el precepto bíblico de “…felices los que son perseguidos por practicar la justicia porque a ellos pertenece el reino de los cielos…”

Con estas afirmaciones podemos decir que “…se terminó el tiempo de la inocencia para el padre Sebastián…”. No son afirmaciones de un joven “que no sabe”. Son claramente justificatorias de un estado de situación.  Le podríamos preguntar al Padre Sebastián si realmente hubo una guerra sucia. La desaparición forzada de personas, el robo de bebes, la confiscación de las propiedades privadas de los detenidos, son parte de una “supuesta guerra sucia”. A esta miserable violación de los derechos más elementales de los ciudadanos solo se le puede responder ¿con el “ganado cielo” por ser perseguido?

Por otra parte, que hacemos con aquellos ciudadanos a los cuales la fe no les ha llegado, ¿tendrían que hacer una reconversión religiosa urgente para “ganar el cielo” porque le estaría vedada la justicia de los hombres? A su vez, creo que también seríamos muchos los cristianos que querríamos que la justicia también se aplicara en tribunales y no solamente como corpus metafísico. Son realmente incongruencias muy serias para minimizarlas o dejarlas exclusivamente en el campo de lo espiritual, como si lo espiritual estuviera desligado de la vida concreta de los hombres en la tierra.

Otro de los desafortunados pasajes de la homilía es cuando sostiene que el sentimiento de “juicio y castigo a los culpables” es un sentimiento adolescente. Por otra parte llama a que “el tiempo de la intolerancia” quede atrás. La pregunta es si los treinta años de lucha de los movimientos por los derechos humanos fue parte de la insustancialidad juvenil.
Asimismo, podría decir el Padre Sebastián ¿quienes son los intolerantes? Al robo de los nietos, las Abuelas le respondieron con la paciencia de la búsqueda democrática y pacífica para recomponer la identidad de los nietos recuperados. A la desaparición de sus hijos las Madres respondieron sin ningún acto de violencia o pretensiones de justicia por mano propia. Los bienes robados directamente fueron irrecuperables. La pregunta debe volver a repetirse ¿Quienes son los intolerantes, padre Sebastián?

Estas reflexiones de la homilía ya fueron escuchadas. En un sentido parecido se afirmaba que si Videla tenía que trazarse un programa de gobierno ese sería el ideario de la pastoral de Monseñor Tórtolo. No olvidemos que Tórtolo era en la época dictatorial Arzobispo de Paraná y Vicario Castrense y siendo un activo partícipe de la dictadura militar sostenía que “…los buenos cristianos tienen el deber de comprender el momento presente y rogar para que no se caiga en el revanchismo, colaborando decididamente con el gobierno militar, cuyos integrantes parecen bien inspirados…” fuente diario Clarín, 1976.

Luego en el diario La Nación 2/4/76, el Arzobispo afirmaba: “…No tengo pruebas fehacientes de que, efectivamente, los derechos humanos sean conculcados en nuestro país… lo oigo, lo escucho, hay voces pero no me consta. Como argentino, no acepto la aptitud de los legisladores norteamericanos que propician esa investigación…”

Al estimado Padre Sebastián habría que recordarle que en el conjunto de Obispos y Sacerdotes de la Iglesia Católica prevalecieron dos tipos de actitudes muy claras, a saber:
·       Los que acompañaron y apoyaron a los familiares de la víctimas defendiendo la plena vigencia de los derechos humanos.
·       Los que colaboraron y apoyaron la política represiva, actitud por la cual la Iglesia Católica en muchos de sus miembros hizo una todavía leve autocrítica.

En la primera de ellas, con un fuerte compromiso por los derechos humanos, en apoyo de los pobres, hambrientos y humillados se ubicaron los Sacerdotes y Seminaristas Palotinos, como también lo hicieron el Obispo Angelelli, las Monjas francesas asesinadas, y numerosos religiosos y laicos católicos que lucharon contra la dictadura militar.

Finalmente la homilía es un atraso con respecto al documento que la Iglesia Católica utiliza el 9 de septiembre de 2000 donde el Episcopado pide perdón por sus “errores” del pasado.
El documento toma ocho aspectos sobre los cuales los cristianos tienen que pedir perdón. Pecados contra la unidad; pecados contra el servicio de la verdad; pecados contra el evangelio de la vida; pecados contra la dignidad humana; pecados contra los derechos humanos; pecados contra la integridad de las personas; pecados contra el respeto a las etnías y culturas; y pecados contra el espíritu de renovación del Concilio Vaticano II.

En el mismo documento, en el apartado sobre los pecados contra los derechos humanos, la Iglesia Católica sostiene sentir un profundo dolor contra:
·       La violación de todos los derechos humanos fundamentales.
·       En la historia hemos sostenido posturas totalitarias.
·       Sostuvimos violaciones a las libertades democráticas que violan la dignidad humana.
·       Pide perdón por los silencios, responsables y de los otros.

Por último, sostiene en su homilía el Padre Sebastián, que se reúnen en la Misa para ver “…lo que hoy son para nosotros los mártires Palotinos y no lo que fueron o habrían podido ser…”
Lo que nuestros muertos significan en nuestras vidas hoy, no pueden estar desligados de lo que ellos fueron para nosotros. Una guía espiritual de compromiso ético con la vida. Un compromiso con todos los derechos fundamentales de la vida misma. ¿Suponemos que para el Padre Sebastián es de igual manera? ¿O no?

Análisis del Profesor Daniel Lenci
Asesor de la Subsecretaría de Relaciones Institucionales
Jefatura de Gabinete de la Nación

lunes, 15 de agosto de 2011

UN TRIUNFO DE CRISTINA KIRCHNER QUE NOS EXIGE MADURAR LA RENOVADA ILUSION...


Las elecciones primarias que se realizaron ayer en todo el país con un triunfo arrollador de la compañera Cristina Fernández de Kirchner han puesto en discusión todas las profecías políticas falsamente creídas por una oposición derrotada, atomizada y sin horizontes certeros alimentadas por corporaciones mediáticas que funcionan más como un poder político que como medios serios de información. También es bueno señalar que tan abultado triunfo de la Presidenta sorprendió al propio oficialismo que esperaba un resultado menos contundente.
La Presidenta fue construyendo un nuevo estilo discursivo a partir de asimilar las experiencias de Capital y Santa Fe donde se comenzó a mostrar mucho más preocupada por ampliar las bases del reconocimiento a la solidez de su gestión que a la confrontación ideológica. Ese es realmente su perfil más fuerte y significativo. Cuando logra mostrar su estatura de estadista se acrecienta el fortalecimiento de su figura ante una oposición carente de ideas, con reminiscencias de un pasado repudiado y con la gravedad de no poder proponer una agenda seria que pueda ser creída por el electorado.
Sin embargo, se debe escuchar a la Presidenta en toda su magnitud. Cuando dice que “no hay que créesela” quiere decir que debemos militar por una gestión cada vez más transparente, humilde, proponiendo ideas superadoras, siendo cuidadosos de la responsabilidad institucional. Es un momento donde debemos aprovechar la debilidad opositora. Hacer una convocatoria amplia, generosa, donde el peronismo como columna vertebral del Frente para la Victoria consolide sus posiciones políticas y de gestión. Estamos en el momento de lanzamiento de una nueva etapa política que no podemos desaprovechar, sobre todo, teniendo en cuenta que el triunfo en octubre reformulará un nuevo mapa político con nuevos liderazgos que deberán sortear un dato insoslayable de importancia estratégica como es el hecho de que Cristina Kirchner no pueda reelegir, salvo que se modifique la Constitución Nacional dato que sería sencillamente una irracionalidad proponérsela.
La corporación mediática tratará ahora de colocar a Binner como la nueva estrella en crecimiento al cual van a ponderar como un ganador a pesar de la derrota. Es bueno recordar que el gobernador de Santa Fe fue derrotado en su propia provincia luego de haber ganado la gobernación. El macrismo fue derrotado también en su territorio. Todas estas maniobras tendrán un corto vuelo. ¿Dónde está la supuesta “crispación”?
Sin embargo, es un momento apasionante para nosotros donde se nos impone la creación de un nuevo tipo de sujeto colectivo que nos permita desde la militancia diseñar los nuevos desafíos, construir los nuevos liderazgos. Cristina deberá ir trastocando lentamente su rol donde la Presidenta tendrá cuatro años para ir fortaleciendo el rol de Conductora.
Prof. Daniel Lenci, Jefe del Departamento de Historia, Colegio Nacional de Bs.As.

jueves, 14 de julio de 2011

FITO PAEZ PUSO EN DISCUSION ALGO MAS IMPORTANTE QUE EL SIGNIFICADO DE LA PALABRA ASCO....


Cuántas interpretaciones diversas motivaron la nota que el genial músico publicó en un matutino de nuestra ciudad al manifestarse con tanta claridad sobre el resultado de las elecciones capitalinas. Lo que en realidad ocurrió es que Fito Páez con conciencia de lo que iba a generar -o sin ella- arrojó un tsunami devastador sobre la conciencia de “ellos” y “nosotros”.
Unos -“ellos”- comenzaron una feroz campaña demonizadora que buscó crucificar al músico, de clara filiación democrática, como lo ha demostrado a lo largo de toda su carrera, que por medio de una operación mediática comenzó a ser tildado de fascista, intolerante, propulsor de militarismos, crispado y no se cuantos adjetivos más que llevaba por objetivo involucrar directamente al kirchnerismo en esa ofensiva.
Otros, pero cerca de “ellos”, sostuvieron algo parecido pero tratando de matizar sus críticas  con el agregado “como es posible que un músico tan genial” pueda decir estas palabras que suenan tan intolerantes. Sin embargo “ellos” no dijeron nada cuando Elisa Carrió deseó públicamente la muerte de Néstor Kirchner, cuando Mauricio Macri pretendió tirarlo por la ventana, cuando Eduardo Duhalde habló de perdonar de una buena vez a Videla y cerrar el tema del proceso que era un tema del pasado o cuando  Ricardo Alfonsín escupiendo sobre la historia de su propio apellido hizo una alianza electoral con lo más recontrapodrido del neoliberalismo conservador.
Cuanta hipocresía en el debate, cuanta liviandad. Pero por suerte existe Fito para romper la modorra en la ciudad de pobres corazones. Los porteños se verán obligados –quieran o no- a discutir el tema.
Sin embargo, “nosotros” recibimos el estallido de diversas maneras. Algunos de “nosotros” -pero bastante parecidos a “ellos”- se propusieron inmediatamente hacer docencia con Fito al cual lo “intentaron interpretar” como a un artista con alas creativas especiales que puede manifestarse como quiera aunque “ellos no dirían lo que dijo”, otros le “explican con consejos” al músico como hay que explicarles a los porteños –que no demandan explicaciones algunas-  lo que no se le pudo explicar durante la campaña. En algunos casos parecen decididamente miedosos para salir de la agenda que le proponen los medios y la mayoría exultante porteña.
Ahora yo digo: ¿El tsunami es solo para “ellos”? ¿No se desparrama ni una gota para nuestro lado? ¿Tuvimos errores, cuáles? Parece mentira que si no generaba esta explosión el músico con su contratapa estábamos más callados que el penado catorce, como dice el tango, y seguramente íbamos a terminar -en la ciudad- haciendo señas como el penado desde el silencio. Porque no lo decimos de una buena vez: En treinta años de militancia en el peronismo nunca pudimos observar tanta apatía en una campaña, a pesar de que contábamos esta vez con un liderazgo nacional de excepción.
Comencemos. La ciudad de Buenos Aires tiene una historia muy compleja. Alberga por un lado una tradición democrática y pluralista que ha defendido a lo largo de toda su  historia. Sin embargo lo ha hecho con una carencia notable, porque ha afirmado “principios liberales” sin consolidar “principios democráticos”. Hoy ninguno de nosotros se animaría a sostener una democracia que no aceptara la incorporación de derechos sociales, económicos y de tercera o cuarta generación, que es de lo que está careciendo la ciudad. Discriminación, salud pública deteriorada, educación en crisis, aliento a la xenofobia, elementos de gestión municipal deficitarios, son algunos de los elementos que no podemos desconocer. ¿Y sin embargo, que? Los temas de la gestión deficiente ocuparon un secundario lugar en la agenda política de campaña.
Tuvimos tres candidatos aceptablemente buenos. Los tres tenían gestión sobre sus espaldas y todas exitosas. Alguien debería explicar con cierto raciocinio porque entonces no se hizo que los candidatos compitieran por el voto de los ciudadanos en elecciones abiertas. El ganador hubiera salido potenciado.  La ciudad de Buenos Aires es sensible a la defensa de su autonomía, a la que reclamó insistentemente teniendo que sobrellevar que la misma fue lograda a partir del Pacto de Olivos. No se puede hacer campaña donde la línea argumentativa es la intromisión del Estado Nacional como factor de resolución de los problemas de gestión. Buenos Aires no observa esto como algo positivo como tal vez lo podría observar una provincia del interior donde el Estado generalmente está menos presente y se aspira a dicha presencia.
Tres candidatos haciendo campaña, con experiencia de gestión, recorriendo los barrios, ganando adhesiones, para que luego un dedo, por más que ese dedo sea de una importancia colosal, no cae bien en la conciencia y en la práctica de los porteños.
Por otro lado, llevamos tres colectoras sin explicar a la ciudadanía el porque de las mismas. Si son tan buenas realmente lo importante es mostrar esa diversidad como atractivo y si son malas no es conveniente hacerlas. Pero hacerlas y no aprovechar esa pluralidad es por lo menos un acto de ingenuidad mezquina. 
Por otra parte, la lista oficial de legisladores del Frente para la Victoria terminó presentando una incoherencia de formato. En los primeros cinco puestos, cuatro candidatos que tienen una historia de vinculación con el tema de derechos humanos. En algunos casos excesivamente recientes. ¿No teníamos otros representantes de áreas distintas? Sin embargo, dentro de esa temática, solamente el compañero ubicado en el quinto lugar -Juan Carlos Dante Gullo- podía mostrar una historia de militancia y coherencia en el peronismo probada a lo largo de muchísimos años.
Por otra parte, no debemos pedirle a nuestro candidato que haga lo que no siente o se disfrace de algo con lo que no concuerda por su especialidad o formación, pero es necesario que la campaña se encare de otra manera. Si el “otro” es planteado como el nene bueno, rubio, de ojos celestes, pacífico, si se quiere incluso algo tonto, el nuestro cuanto menos debe ser “el que recorre el barrio”, pícaro, irreverente, ganador, contestatario.
Salir toda la última semana a hacer eje en “solicitar un debate” donde “se especulaba con la fuerza de la intelectualidad del candidato” cuando el planteo del “otro” es no debatir, incluso despolitizar la contienda, hablar del bigote de utilería en lo de la Susana, es no solo limitado como propuesta sino también bastante ingenuo.  
Por último, me resta decir: gracias Fito. No sé si tiene razón. No sé si son justos los planteos. Pero realmente no me importa mucho porque lo que generó fue un bolonqui sensacional que era necesario para despertar a una ciudad dormida de muchos sueños.
Profesor Daniel Lenci
Jefe del Departamento de Historia
Colegio Nacional de Buenos Aires

jueves, 9 de junio de 2011

Cuando hablamos de educación hablamos de aprendizajes, de valores, de inversión educativa...

Tuve la placentera oportunidad de reunirme por más de una hora con el Ministro de Educación Prof. Alberto Sileoni con motivo de entrevistarlo para la Revista "Integración Federal" de la FUNIF (Fundación para la Integración Federal) que acaba de ser publicada y su lectura humildemente recomiendo. Me une a Alberto Sileoni una amistad de muchos años ya que fuimos estudiantes de la vieja Facultad de Filosofía de la UBA en la Carrera de Historia y hemos compartido discusiones, peronismo y amigos comunes por muchos años. Sin embargo, debo reconocer la extraordinaria capacidad y evolución como cuadro político y de gestión que el hoy Ministro de Educación ha desarrollado. Abordamos muchos temas, pero algunos fueron realmente fundantes. Va a continuación los aspectos salientes de la entrevista:
Entrevista realizada al Ministro de Educación Prof. Alberto Sileoni
Por Daniel Lenci y Laureano Ralón

En el Consejo de Redacción de la Revista discutíamos ayer cuando preparábamos esta entrevista acerca del impacto que tuvo el año pasado el conflicto estudiantil que puso en el centro del debate algunas discusiones. La sociedad, por ejemplo, se plantea: ¿Qué es la educación? ¿Por qué existen proyectos educativos alternativos? De pronto hay visibilidad que la Ciudad de Buenos Aires no tiene el mismo proyecto que la Nación. En síntesis: ¿De que hablamos cuando hablamos de educación o cuando le decimos a los chicos “…estudien que nosotros queremos esto de Ustedes…”?
Por supuesto que hay proyectos alternativos y hay miradas sobre la educación que confrontan, como miradas sobre la seguridad o el desendeudamiento. Yo soy optimista en que creo que buena parte de la sociedad ha advertido que la educación dejó de ser un tema exclusivo de los educadores; que la educación es un tema que debe ser asumido por la sociedad en su conjunto – estoy hablando de empresarios, comerciantes, padres -por supuesto-, familias, gremios, etc.; que sólo los educadores no pueden educar, eso está claro. Y evidentemente nosotros formamos parte de un proyecto político iniciado en el 2003 que creemos que ha puesto en el centro de las preocupaciones la educación. Siempre digo que el primer gesto de gobierno de Néstor Kirchner fue ir a una provincia -Entre Ríos- que hacía 90 días que no pagaba salarios en cuasi monedas, y eso no es un accidente sino que fue todo un señalamiento a la sociedad que la educación iba a estar en el centro de sus preocupaciones. A partir de ahí, después si quieren podemos explayarnos sobre las medidas.  Nosotros arrancamos el gobierno con un poco menos del 3% del PBI dedicado a educación y el 5% del PBI dedicado al pago de los intereses de la deuda externa. Y en este año, aún con un presupuesto que no fue aprobado por la irresponsabilidad de la oposición, nosotros – y cuando digo “nosotros” digo la sociedad argentina en su conjunto – estamos en un 6.4% del PBI dedicado a educación y en un 2% del PBI dedicado al pago de la deuda. Esto nos parece que es una Argentina distinta, y en ese marco cuando hablamos de educación hablamos de aprendizajes, hablamos de valores, hablamos inversión educativa…
Es hablar de inclusión entonces….
Si…Hablamos de inclusión, por supuesto, pero tampoco inclusión a cualquier precio.
¿Qué significa eso de “inclusión a cualquier precio”?
Hay algo que no se debe aceptar, y todavía nosotros tenemos deudas allí, que es la situación de los chicos que están en la esquina fuera de la escuela, sobre todo adolescentes. Eso es inaceptable. Pero también es inaceptable que estén dentro de la escuela sin aprender. Entonces ahí nosotros tenemos una discusión fuerte y hay un desafío. Por supuesto que creemos en la calidad educativa, pero no creemos en un concepto de calidad educativa prestado de las ciencias económicas o del mercado: un concepto de calidad educativa que se une a otros tales como “excelencia”, que se une a otros tales como “eficiencia” y “eficacia”, que a algunos les permitiría pensar – sobre todo a los sectores más conservadores – que hay que elevar la calidad educativa a cualquier precio; y eso sería elevarla al precio de que se nos vayan los pibes de la escuela. O sea que ahí hay una tensión muy fuerte, y nosotros “somos la primera generación que hay dicho la sociedad argentina quiere que todos sus hijos vayan trece años a la escuela.” Esto es preescolar un año, mas primario y secundario – dividido ya sea en seis años y seis años o en el modo tradicional de siete y cinco años – pero toda la sociedad argentina quiere que sus hijos vayan trece años a la mejor escuela. Esto es un desafío: esa universalidad de una buena escuela hasta hace muy poco se la exigíamos al nivel primario; hoy se la exigimos al nivel secundario…
Bueno, es precisamente ahí, en la escuela media, donde impacta más el tema de la calidad educativa….
Absolutamente. Justamente por eso la Presidenta lanzó el 17 de febrero del año pasado una serie de medidas para mejorar la escuela secundaria, para hacerla más inclusiva, para mejorar la calidad…
¿Qué medidas por ejemplo?
En un plazo que estamos trabajando tendemos a que haya diez materias en el secundario por año, en contra de la fragmentación del conocimiento, porque hay algunas provincias que tienen hasta quince materias y en otras escuelas técnicas llegan hasta diecisiete disciplinas, lo cual es un disparate. Sabemos que una de las fallas de la escuela es la inexistencia de adultos por tiempo más completo frente a los chicos, que en otras escuelas privadas o algunas públicas lo resuelven con tutores. Sabemos que los pibes tienen problemas en algunos momentos de la escolaridad donde son más frágiles, por ejemplo cuando dan exámenes. Entonces el año pasado hemos intervenido en 3000 escuelas, dotándolas de recursos financieros/económicos para que puedan contratar profesores por tiempo más completo o que puedan ser tutores y ayudar a los pibes en los exámenes. Y este año vamos por 6000 escuelas más, totalizando las 9000 escuelas secundarias. En diciembre del año que viene, todos los pibes de la secundaria y  probablemente sus docentes también, van a tener una netbook en una relación uno a uno. Es decir, computadoras para todos. Bibliotecas en todas las escuelas, con más libros y recursos. Este año hemos impulsado un conjunto de actividades sociales: en 1000 escuelas arrancamos con una actividad curricular, para que los chicos que se reciban hayan pasado por lo menos un cuatrimestre realizando acciones comunitarias que los relacionen con el contexto en el cual viven…
Sin embargo los medios y algunos sectores de la oposición han hecho mucho hincapié en el tema de las pruebas PISA, donde Argentina sacó un cierto porcentaje que no se correspondería con el nivel de inversión educativa que el país realiza. ¿Cómo es posible que siendo Argentina uno de los países que más invierte en el cono sur quede por debajo de otros países de la región que invierten mucho menos?
Ahí hay varias razones. Primero que la inversión educativa exige un tiempo, que no es toda la vida, pero exige un tiempo. Nosotros estamos invirtiendo desde el 2003, no estamos invirtiendo desde hace 20 años. Chile tiene la misma discusión y ahora el gobierno de centro-derecha está discutiendo toda la inversión que hizo el gobierno de la Concertación, que fueron 20 años creo, cuatro periodos; y no ven los resultados deseados.
Hay índices que dicen que en Chile lo que se ve es una mejora en las pruebas PISA  que sin embargo no se correspondería con un mejoramiento del nivel de equidad….
Bueno, en Chile tienen otra cuestión. Tiene buena parte de su educación privatizada. Como para entender: los que argumentan que después de una inversión no vemos resultados se dividen en dos. Hay una argumentación que yo escucho con atención que es bien intencionada, y hay otra argumentación que proviene del establishment educativo, de aquellos que cuando gobernaron no hicieron lo que hoy nos exigen que nosotros hagamos. Entonces es una discusión muy fuerte, porque todos en la Argentina hoy tenemos pasado político: ha gobernado la centro-derecha y lo está haciendo ahora en la ciudad de Buenos Aires; ha gobernado el Radicalismo; ha gobernado la Alianza; ha gobernado la dictadura; hemos gobernado nosotros, el peronismo, en varias épocas; han gobernado todos. Entonces ahí hay un razonamiento que es el siguiente: cuando Néstor Kirchner decía que estamos en el infierno y de a poco íbamos a salir, también en educación estamos en esto. Hay todo un proceso de inversión en educación que es menos visible hasta hacer un avance material que te permita incidir un poco mejor en el mejoramiento del aprendizaje. Y en esto la metáfora del edificio funciona bastante bien: hasta empezar a ver el primer y segundo piso pasa bastante tiempo porque se estaba trabajando desde abajo. Lo dijo la Presidenta en su discurso ante la Asamblea Legislativa el 1º de marzo: para mejorar los aprendizajes tenemos que tener mejores escuelas, y vamos a terminar la gestión con alrededor de 1700; tenemos que tener más inversión educativa; tenemos que tener mejores salarios; tenemos que dejar las fotocopias y pasar al libro; tenemos que tener padres con mejores salarios y mejores trabajos, porque eso hace que se sostenga más a los chicos en la escuela. Bueno, todo esto es lo que se ha hecho. Y si todo esto se ha hecho, después haciendo esfuerzos del orden pedagógico más estricto dentro del aula, los aprendizajes van a mejorar. De hecho quiero decir una cosa: la prueba PISA mide 2006/2009, la última fue en el 2009. Si uno toma 2000-2009, hemos empeorado; pero si uno toma 2006-2009, hemos mejorado. La Argentina, si uno toma el periodo 2006-2009, en lo que es comprensión lectora, fue el país que más mejoró en América junto con Colombia, que no es un detalle menor, porque en tiempos televisivos cuando uno tiene que dar una opinión en tres minutos hay cosas que no se pueden explicar en detalles. Uruguay está más alto que nosotros, pero Uruguay tiene el 75% de los pibes adentro de la escuela; nosotros tenemos el 85% de los pibes adentro de la escuela. O sea que para hacer ese análisis hay que tener en cuenta lo que se llama el “índice de cobertura”, porque sino yo digo lo siguiente: yo podría hacer un extraordinario sistema educativo para 6 millones de alumnos, pero nosotros tenemos 11 millones de alumnos; tenemos una tasa de cobertura muy importante, y cuando ya estás incorporando a los últimos, estás incorporando a los más pobres, pibes que son la primera generación en su familia de estudiantes secundarios. Cuando más alumnos se incorporan, cuando tu tasa de cobertura es mayor, evidentemente vamos a tener problemas relacionados con la calidad del aprendizaje. Pero ahí me apuro y digo que no es porque los pobres sean menos capaces, como me dijo algún periodista, sino que estoy sugiriendo que los pibes pobres tienen bastantes obstáculos de aprendizajes. Lo que siempre hizo la clase media cuando un pibe no anda bien en la escuela es ponerle un profesor particular, pero los sectores pobres no pueden hacer eso. El pibe anda mal, teclea, y si el colegio no es muy sensible para recuperarlo – por eso esas reformas para poner algún tutor o alguien que lo ayude – termina repitiendo. Cuando ese alumno tiene uno o dos años de repitencia, ya se ve más grande y abandona la escuela. Ahí también hay una aceptación del destino con respecto a la discapacidad del pibe. El padre dice, “bueno, salió como yo, no le da la cabeza para estudiar.”  Cuando la verdad es que no es así.
Quiere decir que la “tasa de cobertura” de Argentina es muy sólida….
La Argentina es un país que tiene una tasa de cobertura mayor que Uruguay, tiene una tasa de cobertura mayor que Colombia. Pero algo más: ¿Por qué nosotros discutimos la prueba PISA? (Abrimos la discusión y después salieron dos o tres opositores a decir: “el ministro quiere esconder los resultados”). No queremos esconder la prueba PISA; somos uno de los 60 países que está dentro de la prueba PISA por voluntad propia, y pagamos por estar en la prueba PISA. Cuando obtuvimos los resultados hicimos una conferencia de prensa y dijimos que la prueba PISA está pensada para otros contextos, por eso tenemos un avance con los otros ministros de América para hacer una medición propia, sin dejar PISA, que es una prueba de la OCDE. Las pruebas PISA miden a chicos de 15 años que estén dentro del sistema educativo. En Finlandia todos los pibes de 15 años están en segundo año de la secundaria, que es donde deben estar. En la Argentina, en esta última prueba PISA nosotros teníamos un 36% de pibes que han sido tomados en la prueba pero que están en años anteriores porque han repetido, o están en el secundario de adultos, con lo cual la verdad que las diferencias son abismales. Esto no me lleva a decir “estamos bien.” Me lleva a decir: “este es un instrumento que no nos sirve del todo para ver la calidad de la educación de nuestros pibes.” Otra cosa: los países en la vanguardia de esta última prueba PISA fueron Finlandia y los países escandinavos, por supuesto, y después aparecen China-Taipei y China-Taiwán. Esos no son países. Es lo mismo que yo haga una prueba pisa Argentina-Buenos Aires o Argentina-Ciudad de Mendoza. Entonces se compara mal. Igual hay un reconocimiento: nosotros tenemos que mejorar los aprendizajes, pero ahí damos una discusión: para nosotros calidad educativa no es sólo mejoramiento de los aprendizajes. Nosotros decimos: los pibes que han recibido uno de los más de 40 millones de libros que hemos distribuido; los pibes que tienen la Netbook; los 600,000 pibes que están en alguna de las 1200 escuelas nuevas, esos pibes están recibiendo una educación de mayor calidad. Lo que tenemos que hacer – y esa es la deuda o el desafío para este tercer periodo que tenemos – es mejorar los aprendizajes de los chicos; tienen que saber más lengua, matemática, etc.
Países de América Latina, como Cuba, trabajan con un promedio en la relación docente alumno de veinte chicos por docente en el sector primario y de quince alumnos por docente en la escuela media. ¿En la Argentina, cuales son los parámetros? ¿Qué se busca?
Nosotros estamos en estándares más altos, sobre todo en el secundario. Podemos estar en una proporción de 25 a 30 alumnos por docente. Pero no es ahí, me parece, donde tenemos el mayor problema. Vos Daniel sos docente y sabés que un grupo de 30 pibes es manejable.
En la formación docente hay más problemas, me parece.
 Sí, en la formación docente por supuesto tenemos algunos problemas.
¿El sistema de puntaje clasificatorio en la escuela media es correcto?.  Algunos colegas dicen que a un curso o seminario de universidad tiene un reconocimiento parecido en puntaje a un cursillo de menor calidad…       
Por supuesto que coincido. Ustedes saben que estamos haciendo un reordenamiento muy fuerte como Estado Nacional. Nosotros también formamos parte de un Estado que ha regresado, un Estado Nacional que ha vuelto a poner cierto liderazgo en una serie de cosas. Este Ministerio, durante algunos años, en una gestión que no voy a nombrar, tenía una carta de presentación de que decía: “Ministerio de Educación – Ministerio sin escuelas.” Es decir que el Estado Nacional se había retirado, estableciendo algunas funciones de manual como la evaluación del sistema y el refuerzo a las provincias más pobres. Eso dio entre otras como resultado – en la década del 90 y con el derrumbe posterior del Estado – un sistema educativo argentino que era un archipiélago donde cada uno hizo lo que pudo. La prueba está en que en la implementación de la Ley Federal de Educación hubo una treintena o más de modelos que circularon. De este Ministerio no dependen directamente las escuelas; dependen de cada una de las 24 jurisdicciones. Entonces ahí nosotros tenemos que hacer un trabajo muy fuerte de evaluación institucional y de liderazgo. Nosotros hemos generado el Instituto Nacional de Formación Docente, tratando no de que dependan los institutos de él, pero sí de generar políticas para la formación docente. Hasta hace dos años para ser maestro en la Argentina tenías que estudiar tres años; desde el 2008 hay que estudiar cuatro años – un 25% más –, con un último año muy parecido a una residencia médica donde el estudiante debe sumergirse en la realidad. Y estamos trabajando por supuesto mucho en la formación docente del nivel medio. Pero este docente es un docente mejor pago; es un docente que tiene menos urgencias en lo personal, y que tiene alumnos con menos urgencias también. No digo que estamos en el paraíso, pero en algún momento en alguna provincia el 80% de los alumnos que iban a la escuela eran pobres. Esto está cambiando en la Argentina. Nos parece que estamos entrando en un momento donde se dan mejores condiciones para educar, y por eso esta etapa cualitativa distinta que viene ahora: tiene que haber clases todos los días como dice la Presidenta, y ese es un trabajo que tenemos que hacer porque a nivel secundario hay mucho ausentismo docente. De todos modos, hay dos pequeñas buenas noticias: el año pasado fue el año con más días de clase de los últimos diez en la Argentina, y este año empezamos el ciclo electivo con la más baja conflictividad de los últimos años. El 28 de febrero arrancamos en Marcos Paz con la Presidenta y dos días después estaba todo el mundo en clase en la Argentina.
En materia de alfabetismo, ¿Estamos en parámetros parecidos a América?
No, estamos considerablemente mejor.
¿Con la asignación universal por hijo se ha pegado un salto cualitativo en ese aspecto?
No, ahí no hay tanto impacto con respecto al alfabetismo. Teníamos 1.8% de analfabetismo, lo cual en América es una cifra muy importante. Esto hace uno años era 700,000 argentinos; si vos lo ves como porcentaje es poco, pero no es una cifra menor. Lo hemos bajado. Se han alfabetizado más de 200,000 argentinos, y seguimos en ese proceso de alfabetización. De todos modos, si bien la media nacional es 1.8%, en algunas provincias tienen el 7%, especialmente en el norte argentino. Y si ustedes van al interior de esas provincias entre las mujeres se llega al 25% de analfabetismo. O sea, a nivel nacional estamos muy por arriba de América, pero hay que seguir trabajando en algunas provincias.
 ¿Hay alguna evaluación en relación al impacto del Programa Conectar Igualdad con respecto a los sectores más carenciados? ¿Qué pasa con los chicos carenciados cuando reciben las computadoras?
Hay mucho impacto positivo. Yo creo que es un elemento de igualación de derechos extraordinario. De derechos y de oportunidades, como dice la Presidenta, porque recibe la misma computadora un pibe del fondo de la Matanza que un pibe de Capital. Eso es extraordinario. Por supuesto no creemos que una computadora, por llegar a un aula, mágicamente va a mejorar la calidad educativa; pero sabemos que tracciona positivamente en el mejoramiento de la calidad. La computadora tiene más de 40 programas y va acompañada de conectividad. En algunas escuelas todavía puede tardar la conectividad, pero ese es el destino. Entonces indudablemente es una computadora que llega con miles de recursos para los docentes. Estamos trabajando ya en la capacitación docente y el recibimiento es extraordinario.
Muchas gracias Ministro por su tiempo
No por favor, fue un gusto.


Prof. Daniel Lenci
Lic. Laureano Ralón